Los espumeros son seres marinos de la mitología cántabra. Se los describe como hombrecitos muy pequeños y regordetes vestidos siempre con una túnica del color de las algas. Su nombre alude a que al estar juntos disfrutan con la espuma del mar, ya sea la de la creta de las olas o la que forman los barcos al navegar. Tienen unos ojos tan brillantes que pueden ayudar a los barcos como faros cuando la niebla invade las costas.