Conocido también como Cuero, se trata de una criatura mitológica de las tradiciones del sur chileno. Se dice de la manta, que habita lagunas y ríos, mostrándose como un cuero vacuno que flota en el agua. Al tener la alcance a su víctima, la envuelve y atrapándola con sus uñas y succionándola con sus ventosas. En otras versiones, se dice que en vez de uñas tiene ojos en sus bordes. Tiene pues, algunas similitudes con el mito del piuchén.