Muroni
El muroni es un vampiro de la zona de Walasia que cambia de forma y puede aparecer con la apariencia de un gato, un sapo, o quizá una araña o un perro de aspecto sobrenatural.
Suele alimentarse de la sangre de los vivientes y cuando alguien lo descubre en su tumba, pueden verse en largúisimas uñas y restos de sangre fresca en los ojos, nariz, oidos y boca.
Para matar al muroni, debe clavarse una estaca en su corazón.