Diferenciando mitos de leyendas

Las palabras mito y leyenda suelen evocarse en forma conjunta, porque la asociación de significados entre ambas es prácticamente espontánea.

Sin embargo, es posible establecer una diferenciación entre ambas:

La leyenda

La leyenda suele ser un relato maravilloso que algunas veces tiene origen en algún evento histórico, pero que suele estar enriquecido por numerosos elementos fantásticos. Es una producción literaria de creación colectiva sobre la existen diferentes versiones. Muchas de ellas han llegado a nuestros días incluso como auténticas piezas literarias.

Ejemplos de leyendas:

La leyenda de Tristán e Iseo

La leyenda del rey Arturo

El Mito

A diferencia de la leyenda, el mito describe más claramente una historia que guarda una estrecha relación con lo religioso. En efecto, posee componentes alegóricos evidentes que refieren a una fuerza de tipo creadora o mágica que forma parte vital de la tradición que los genera. Los mitos, tienen así, una influencia importante dentro de las costumbres de una sociedad.

Por otra parte, como explica Mircea Eliade, el relato mítico posee una estructura circular que transcurre durante un tiempo extra-temporal y a-histórico en el cual los sucesos se repiten periódicamente simbolizando con frecuencia acontecimientos cíclicos observables en la naturaleza. Otras veces, el mito representa una explicación sobre el origen del mundo y es un sustento de la cosmovisión de una cultura.

Ejemplos de mitos:

El mito de Isis, Osiris y Horus, que tiene por temática principal la muerte y resurrección, es una clara alegoría de los los ciclos de la cosecha y su renacimiento a partir de las semillas.

El universo cíclico de la concepción hindú, se expresa claramente en sus relatos míticos de la creación

por Graciela Paula Caldeiro